El precio del accidente «Ever Given»

Un carguero de 400 metros de largo pone a prueba la economía euroasiática

Il prezzo del caso "Ever Given"

El caso

El 23 de marzo una tormenta de arena, con ráfagas de viento de 50 km / h, hizo que el carguero Ever Given encallara en diagonal en el Canal de Suez, bloqueándolo por completo.

El buque de 220.000 toneladas, 400 metros de eslora y 58 metros de ancho encalló en la popa y en la proa, creando un incidente sin precedentes en la historia naval.

Las autoridades del Canal de Suez (SCA) están trabajando incansablemente en la logística del rescate. Hasta 8 remolcadores, una draga y una excavadora están llevando laboriosamente la embarcación a la posición flotante.

El bloqueo del canal parece continuar por otros días dada la extraordinaria situación y el gigantesco tonelaje de Ever Given.

Aunque no se trata de una tragedia familiar ni de un desastre, el mundo entero está observando el incidente con ojos preocupados, lo que corre el riesgo de causar graves daños a la ya debilitada economía euroasiática.

Precedentes

El Canal de Suez es una maravilla de la ingeniería con una larga historia a sus espaldas. El proyecto fue dirigido y completado por el ingeniero Ferdinand Lesseps en 1867. Para el cruce del canal las autoridades han establecido procedimientos muy específicos antes de emprender la ruta, a menudo sujeta a tormentas de arena y mal tiempo. A pesar de ello, en sus 150 años de historia el canal ha sufrido repetidos cierres por guerras y accidentes. En 2018 el barco Panamax Alexander y en 2016 el MSC Fabiola provocaron un bloqueo temporal.

Una economía global pero frágil

El 90% del comercio mundial se realiza en el mar. Una media de 50 embarcaciones al día pasan por este estrecho canal, que evita la circunnavegación de África para llegar a Europa.

El problema de liberar el buque lo antes posible se deriva del hecho de que actualmente hay casi 300 buques mercantes bloqueados en ambos puertos, lo que produce una pérdida de unos 400 millones de dólares la hora. (fuente). Incluso si Ever Given pudo navegar en este mismo momento, desafortunadamente, la cadena de suministro europea ya ha sufrido retrasos en la entrega a sus respectivos puertos en Europa, Asia y Oriente Medio, creando un efecto dominó a gran escala. Un flujo continuo de mercancías, así como de crudo, cuya inercia fue interrumpida abruptamente por factores naturales posiblemente concurrentes a los de la cadena de mando del buque.

El caso vuelve a poner de relieve la fragilidad de nuestro sistema de comunicación comercial.

Al igual que en 2020, en el apogeo de la pandemia, el transporte fue limitado, si no imposible, debido al cierre forzoso de muchos puertos y centros comerciales y navales. Hoy, un año después, una tormenta de arena derribó a un gigante del mar, proyectando un futuro no prometedor para la economía euroasiática.

Il prezzo del caso "Ever Given"

¿Cuáles son las consecuencias de este accidente?

Además de nuestros productos pedidos online, existen sobre todo materias primas, imprescindibles para la producción industrial. Repuestos para maquinaria pesada, minerales, crudo y sus derivados. Materiales que se encuentran en lo más alto de la cadena productiva y que en su ausencia imposibilitan la realización de las acciones diarias más simples, como el clic en “Comprar este producto” en una página web.

El retraso de la clasificación logística, de todos los barcos indirectamente involucrados, llevará mucho tiempo. Algunas embarcaciones han optado por la circunnavegación del continente africano. Una elección obligatoria para algunos, que podría seguir el riesgo de piratería en áreas de Nueva Guinea.

No solo será nuestro paquete de Amazon o el vestido pedido a Hong Kong el que sufra sino sobre todo las industrias por la falta de repuestos, materiales o componentes útiles para completar la cadena de producción diaria.

Una inercia comercial gigantesca frenada repentinamente por un factor natural y técnico que requerirá mucho tiempo y costes adicionales considerables para recuperar su ritmo.

Marco Pachiega.